Las microfugas en la odontología se refieren a los pequeños espacios o separaciones que pueden desarrollarse entre una restauración dental, como un empaste o una corona, y la estructura del diente natural. Estas minúsculas aberturas pueden causar la filtración de saliva, bacterias y partículas de alimentos en la interfaz, provocando un posible deterioro secundario, sensibilidad y perjuicio a la longevidad de la restauración. Sellar estas separaciones de manera efectiva es crucial para prevenir la aparición de problemas dentales y mantener adecuadamente la salud bucal del paciente.
Las microfugas pueden surgir de varios factores, como una unión inadecuada entre el material dental y la superficie del diente, una preparación o limpieza inadecuada del diente antes de la colocación de la restauración, inconsistencias en la aplicación de agentes adhesivos, contracción por polimerización del material de restauración, y el desgaste natural y desgarro que se produce con el tiempo. Seguir una técnica eficaz, emplear materiales de alta calidad y prestar una atención meticulosa a los detalles son factores esenciales para minimizar el riesgo de microfugas y garantizar el éxito a largo plazo de las restauraciones dentales.
Las microfugas pueden manifestarse en una restauración dental a través de varios signos inconfundibles. Un indicador habitual es la sensibilidad de los dientes en contactos calientes, fríos o dulces. La decoloración en los márgenes de la restauración, que suele aparecer como una línea oscura, puede ser un indicio aparente de microfuga. Otra posible indicación de microfuga se da cuando un paciente experimenta dolor, malestar o en caso de que la restauración se afloje. Hacerse revisiones dentales con regularidad se antoja esencial para detectar estos signos lo más pronto posible y abordar los posibles problemas subyacentes de cara a garantizar la integridad de la restauración dental y mantener la salud bucal.
Minimizar las posibles microfugas en una restauración dental es algo muy importante con pensamiento de éxito a largo plazo. Como ya se ha mencionado, las microfugas pueden surgir de varios factores como, por ejemplo, una unión inadecuada, una preparación o limpieza inadecuada del diente antes de la colocación de la restauración, inconsistencias en la aplicación de agentes adhesivos y tensión en la contracción por polimerización del material de restauración. Seguir una técnica eficaz, emplear materiales de alta calidad y prestar una atención meticulosa a los detalles son factores esenciales para abordar con efectividad estos posibles riesgos de microfugas y, en última instancia, mejorar la durabilidad y longevidad de las restauraciones dentales.
Las bacterias se cuelan por todas partes, y tus restauraciones de composite no son una excepción. Las bacterias invasoras no sólo son problemáticas para la salud y la felicidad del paciente, lo son también para la clínica dental. El 50 % de nuevas empresas proceden de referencias, y un paciente medio supone 1000 dólares anuales para una clínica1, una sustitución prematura de una restauración puede tener un efecto dominó en tu cuenta de resultados.
Comprender las causas raíz de las microfugas en las restauraciones de composite, cómo detectarlas y cómo atenuar el riesgo de que aparezcan desde el principio son las claves de una restauración de éxito a largo plazo. Pero no debes preocuparte; estamos aquí para suprimir los puntos débiles y aumentar la predictibilidad y la eficiencia de tu clínica. A continuación explicamos cómo detectar las microfugas en la odontología restauradora y cómo evitar que ocurran en primer lugar, lo que te permitirá crear experiencias más positivas para los pacientes y hacer crecer tu clínica dental.
Una microfuga se define técnicamente como el paso de bacterias, fluidos, moléculas o iones entre la pared de una cavidad y el material que se le ha aplicado.2
Las consecuencias de las microfugas en la odontología restauradora son importantes: si se produce colonización bacteriana en la interfaz de fuga, la caries no sólo puede volver a aparecer, sino también afectar la vitalidad de la pulpa, lo que podría derivar en la necesidad de tratamiento endodóntico o incluso la pérdida del diente. Como resultado, cada paso durante la colocación de la restauración conlleva el riesgo de aumentar la aparición de microfugas en el futuro y puede influir en el éxito a largo plazo de la restauración.
Clínicamente hablando, existen varios signos que podrán indicar la presencia de microfugas de distinta gravedad, lo que dificulta las decisiones de tratamiento. Unos pocos signos de la presencia de microfugas3 son:
Hay varias formas en que los profesionales pueden prevenir la aparición de microfugas. Pero primero hay que conocer sus distintas causas. Una vez entendidas las causas, es posible adoptar los pasos necesarios para evitarlas. Las microfugas se producen cuando hay partes vacías en el margen de la restauración, facilitando la entrada de bacterias que acaban contaminando el diente4. Elegir materiales y técnicas de eficacia probada para crear restauraciones sin huecos pueden encaminarte para conseguir un resultado excelente.
Un aislamiento adecuado es fundamental para evitar las microfugas, y usar un sistema de matriz ideal puede desempeñar un papel importante en ello. Todos los dentistas son conocedores de la necesidad de un aislamiento apropiado al usar materiales de restauración basados en resinas. Si el sistema de matriz que se está utilizando no sella firmemente los márgenes, existe la posibilidad de que la sangre y la saliva penetren en el campo de la restauración. Esto puede evitarse usando un sistema de matriz que aprovecha un intuitivo diseño en cuña para crear un cierre hermético, como nuestra familia de productos Palodent Matrix.
Elegir los materiales adecuados para tus restauraciones es fundamental para evitar las microfugas. Las resinas de composite empiezan a polimerizar durante el proceso de fotopolimerización. Durante esa polimerización, se generan fuerzas dentro del material que se transfieren al diente, lo que se traduce en fuerzas que se trasladan al diente cementado. Estas fuerzas tiran de las paredes hacia dentro y pueden provocar roturas en el material cementado creando una posible ruta para una microfuga.
Pare evitar esta situación, es preciso elegir un material de empaste con una resistencia de polimerización extremadamente baja, además de con excelente fluidez para que pueda autonivelarse sin necesitar manipulación, proporcionando una adaptación excelente y facilitando la creación de restauraciones sin huecos. SDR® flow+ Bulk Fill Flowable de Dentsply Sirona no solo permite realizar restauraciones sin huecos sino que también:
Tomar la decisión de utilizar materiales de alta calidad es un paso, pero utilizarlos incorrectamente puede conllevar consecuencias no deseadas. Por ejemplo, usar una luz de polimerización apropiada pero sujetarla demasiado lejos de la restauración o en un ángulo incorrecto puede provocar una polimerización inadecuada o desigual, lo que a su vez puede aumentar el riesgo de microfugas. La unidad de fotopolimerización de bajo perfil SmartLite® Pro combina la facilidad de posicionamiento correcto con un perfil de haz homogéneo de elevada irradiancia incluso a larga distancia.
Antes de utilizarlo, es preciso familiarizarse con la técnica adecuada para los productos que hayas elegido. Y para ello, Dentsply Sirona te ofrece la academia dental online , un espacio repleto de seminarios web, vídeos instructivos y ejemplos del mundo real.
No todos los productos y materiales de restauración se crean igual, y ahí entramos nosotros. Nuestro objetivo es proporcionarte los recursos necesarios para que puedas ofrecer la mejor atención posible a tus pacientes, y por eso hemos creado una solución específica para procedimientos de restauración de clase II. Te ayudaremos a mejorar la predictibilidad y eficiencia a tus procedimientos, dotándote de las herramientas y la formación necesarias para aplicar soluciones que mejoren la práctica en general. Si quieres empezar, ponte en contacto con nosotros.